Uniforme escolar ¿Sí, No?
Según la opinión de muchos expertos el uniforme escolar puede llegar a ser una gran ayuda para fomentar la disciplina entre los jóvenes. El simple hecho de que los niños deban ponerse el uniforme implica que deben seguir las normas que determine el centro.
Uno de los aspectos positivos de que lleven uniforme es la disminución de la discriminación entre los alumnos. El hecho de que todos deban llevar el mismo vestuario evita que cada uno lleve la ropa que quiera siguiendo modas, marcas algo que en algunos casos supone un gasto extra para los padres y madres. Si un grupo de niños lleva ropa de marcas no demasiado económicas, obliga al resto a hacer lo mismo para evitar cualquier discriminación y no todos los padres pueden permitírselo.
Por otra parte la existencia del uniforme facilita el trabajo a los padres y madres. De esta manera será más sencillo para ellos decidir que ropa ponerles a sus hijos a diario y teniendo un par de uniformes tendrán siempre uno de repuesto e irán siempre limpios.
El uniforme escolar también facilita el trabajo al colegio. Pueden localizar e identificar cuales son los alumnos del centro y evitar así que jóvenes ajenos al colegio entren en el recinto sin permiso durante el horario escolar.