Calzado laboral: Cómo puede limpiarse y mantenerse
Cuando se trata del calzado laboral, hay que tener en cuenta que su limpieza puede tener que hacerse de determinada manera. Es por ello que hoy, desde Confecciones Lomar, os recordamos algunas pautas para que sepáis cómo tratarlo.
Calzado laboral: Limpieza y mantenimiento de éste
Hay que tener siempre presente que, tanto para mantenerlo como para limpiarlo, el material de los zapatos es muy relevante. A continuación os hablamos de algunos de los más comunes:
- Pieles engrasadas: Es preciso que se use una grasa especial para que se pueda hacer bien la limpieza del calzado.
- Tela: Si los zapatos son de tela, lo ideal es coger un paño húmedo en agua fría, pero sin llegar a empapar el zapato.
- Cuero: Un paño seco es lo más recomendable, además del uso de cremas incoloras que hidraten el material.
- Serraje, nobuck o ante: Un espray especial sería lo más ideal, además del uso de una esponja o cepillo para poder quitar la suciedad.
- Napa: En este caso, un paño seco y cremas que ayuden a que la piel esté más hidratada.
Por otra parte, el calzado de seguridad laboral es algo que, como poco, debe cambiarse una vez por año. Esto se debe, más que nada, a los deterioros habituales, que pueden ser grietas, suelas desgastadas o incluso alguna rotura. Por otra parte, si no tiene desperfectos pero os produce dolor en el tobillo o el talón de Aquiles, habría que cambiarlo de igual manera por una amortiguación deficiente.